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Una de las obras arquitectónicas más fascinantes que podrás encontrar en Sevilla es sin duda la que hace vida en el Seminario Diocesano, de José Antonio Carbajal. El mismo, no solo resulta ser un espacio de renombre para la formación de jóvenes y adultos en esta ciudad tan emblemática de España, sino que también sobre sale por su construcción tan particular y por su historia tan única que amerita un poco más de estudio.

Siendo lo anterior dicho de esta manera, ¿qué más se puede saber sobre la arquitectura del seminario Diocesano de José Antonio Carbajal en Sevilla?

Aspectos clave de la arquitectura del Seminario Diocesano

El primer aspecto clave que hay que conocer sobre la arquitectura del Seminario Diocesano es que todo el edificio se construyó con base en un solar que se ubicaba en la esquina de la avenida Bonanza y la calle Tarfia, donde existen bloques de viviendas situadas al sur. Dicho solar, sirvió como base para el seminario, articulando toda la construcción en general en torno al patio, mismo que se encuentra desplazado desde dentro del solar hasta la esquina de las calles comentadas.

La arquitectura general del Seminario Diocesano de José Antonio Carbajal está conformada centralmente por tres elementos básicos:

1.- El Centro de estudios Teológicos, el cual cuenta con tres plantas que conforman todo el frente que da directamente a la avenida de Bonanza. Aquí se asume la variación arquitectónica de la zona, retratando en un tramo primerizo todo el volumen mediante el uso de un espacio con jardines que lo limita una verja y un seto. En una de las confluencias se encuentra el acceso principal al edificio.

2.- La iglesia y el salón de actos, superpuestos uno de otro y que ocupan un volumen autónomo de altura que equivale a cuatro plantas aproximadamente. Este mismo, se sitúa a caballo entre el Seminario y el Centro de Estudios propiamente dicho, encontrando así que el salón se encuentra rehundido en el terreno y la iglesia.

3.- La residencia, misma que cuenta con acceso independiente desde la calle Tarfia y tiene una traza con forma de peine, cuyo cuerpo a su vez está compuesto por dos plantas que igualan la altura de las naves portuarias situadas justo al lado opuesto de la calle.

La planta baja y la primera planta de la residencia albergan las áreas propias de la comunidad, encontrando que en las plantas altas (desde la tercera a la sexta) se encuentran las habitaciones de los seminaristas.

Como puede notarse, la arquitectura del Seminario Diocesano atiende a un complejo pero funcional programa de requerimientos funcionales, los cuales le permiten funcionar tanto como centro de estudio como seminario en general, encarando un concepto urbano único digno de ser visto por aquellos que realmente disfrutan de la arquitectura.

Breve historia arquitectónica del Seminario Diocesano de José Antonio Carbajal

La historia del Seminario de Sevilla comienza en 1997, año en donde se vio el cambio de desplazamiento desde San Telmo hasta su localidad actual. Este proceso de cambio comenzó en el año 1989, llevándose a cabo la primera colocación de piedra en el año 1994, alargándose este proceso durante 5 años más.

El proceso de construcción del Seminario Diocesano de Sevilla tuvo consigo varias fases, siendo la primera de ellas la construcción de la zona residencial en 1997, luego la segunda fase que fue la consagración de la Capilla Mayor cerca de 1999 y finalmente la zona educativa. ¡Así es como nace este Seminario tan imponente como impresionante!

José Antonio Carbajal fue partícipe de todo el proceso de construcción arquitectónica, diseñando una construcción que combina de manera ingeniosa las líneas modernas de la arquitectura actual junto a formas más tradicionales que abocan a un uso práctico y dogmático de todas las instalaciones. Un ejemplo de esto dicho es el uso del patio central entorno al cual se encuentra la Capilla Mayor.

En cuanto al presupuesto de la obra general se refiere, se puede decir que el mismo abarcó 1.746.016.421 ptas aproximadamente. Esto hizo que se contara con un edificio óptimo y muy bien elaborado que dispone de una superficie que oscila los 1620 metros cuadrados y del cual muchas personas pueden disfrutar.

Se toma el año 1997 como el comienzo del funcionamiento del nuevo Seminario Diocesano de Sevilla porque ese año fue el último en el cual se celebró una eucaristía en San Telmo, dejando este nuevo edificio a cargo de las Hermanas Dominicas de la Inmaculada, cargo que asumieron hasta el año 2008. Después de allí, el edificio quedó a manos de las Hermanas Teatinas las cuales mantienen sus cuidados hasta la actualidad.

Poco más se puede decir sobre este sensacional edificio que tienes que visitar si te interesa la arquitectura de Sevilla, más considerando que esta ciudad española es cuna de las más asombrosas obras arquitectónicas que se pueden apreciar en el mundo. ¿Te animas a visitarlo cuanto antes para constatar esto comentado?

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